Cómo organizar la carga en una furgoneta

Cada vez son más las personas que utilizan una furgoneta para desempeñar su actividad laboral, ya sean profesionales del sector de la construcción o del sector de paquetería y mensajería, entre otros. También muchas personas que no se dedican a esas actividades profesionales, pero necesitan usar furgonetas para trasladar productos o materiales de forma puntual. Por ejemplo, necesitan una furgoneta para hacer una mudanza. En cualquier caso, al llevar mercancía en una furgoneta hay que tener en cuenta la manera en la que esta debe organizarse. Todo esto con la finalidad de realizar un transporte seguro.

Por otro lado, es importante mencionar que, a diferencia de lo que ocurre con vehículos de mayor tamaño, es posible conducir una furgoneta con un carnet de tipo B. Lo que implica que no es indispensable recibir una formación específica en transporte de mercancías.

Consejos para transportar carga en furgonetas

Antes de ponerse manos a la obra para transportar mercancía en la furgoneta es necesario tener en cuenta una serie de aspectos clave relacionados con la distribución de la carga en este tipo de vehículo. Las directrices a seguir son las siguientes:

Planificación de la carga en una furgoneta

Lo primero que debes hacer para organizar una furgoneta es planificar la distribución de la mercancía. Una carga mal distribuida puede generar inestabilidad en el vehículo debido al mal reparto de los pesos.

Además, si la carga en una furgoneta no se encuentra debidamente organizada, las tareas serán menos eficientes. Ya que se invertirá mucho más tiempo en buscar el paquete necesario, generando retrasos innecesarios.

Distribución de la carga en una furgoneta

Transportar carga en furgonetas puede tener algunos riesgos, por esta razón es imprescindible realizar una correcta distribución de la mercancía. Para ello, lo haremos de forma horizontal, es decir, por toda la superficie de carga del vehículo.

También es recomendable colocar los objetos más pesados en la parte más baja de la plataforma. De esta manera se consigue mantener el centro de gravedad de la furgoneta lo más bajo posible. Esto favorece la estabilidad del vehículo y evita que se pueda aplastar la mercancía.

No superar la masa máxima autorizada

El exceso de peso puede generar inestabilidad en la conducción, especialmente en las curvas, al tiempo que incrementa la distancia de frenado. Por esta razón, se debe transportar mercancía que no supere, en ningún caso, la Masa Máxima Autorizada (MMA).

Es importante tener en cuenta que un sobrepeso, además del riesgo que podría suponer para la conducción, puede incrementar la probabilidad de sufrir alguna avería en el vehículo. Y como consecuencia hará que tengas que hacer frente a gastos mayores.

Sujeción de la carga de una furgoneta

Con la finalidad de prevenir el daño de la mercancía durante el transporte, es recomendable sujetar la carga, de manera que no pueda moverse. De esta forma se evita que, en caso de frenado de emergencia o colisión, la mercancía pueda llegar a proyectarse hacia adelante, dañando al conductor y/o a los ocupantes.

Dependiendo del tipo de mercancía se tendrán que seleccionar unos u otros sistemas de sujeción para carga. Algunos de los más usados son los siguientes: correas de sujeción, pernos, cadenas, esteras antideslizantes, barreras, redes y lonas. Estos medios se utilizan para mantener la mercancía segura y estable durante el viaje.

Revisión en las paradas

Si se hacen varias entregas y descargas de mercancía, la carga en una furgoneta irá reduciéndose, lo que provocará que la distribución de los pesos vaya cambiando.

Por esta razón es necesario ir haciendo reajustes en la distribución de la mercancía, de acuerdo a los consejos anteriormente mencionados. De esta forma se reducen las probabilidades de que pueda llegar a haber cualquier percance con la mercancía.

Separación entre la zona de carga y la cabina

Con la finalidad de evitar accidentes, es aconsejable que la carga en una furgoneta esté separada de la cabina de conducción. Para ello se puede recurrir a diferentes dispositivos de retención como redes y rejas de separación o mamparas. De esta forma, el conductor y los acompañantes se encontrarán protegidos frente a posibles objetos que puedan salir proyectados en caso de una colisión o una frenada repentina.

Además, de acuerdo al Real Decreto 2822/1998, los vehículos que transporten carga y personas simultáneamente están obligados a hacer uso de dispositivos de retención que separen el habitáculo de la zona de carga.

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